El miércoles, el gobierno venezolano ordenó la expulsión del jefe de la delegación de la UE a la nación sudamericana tras la decisión del bloque de imponer sanciones a varios funcionarios venezolanos acusados de socavar la democracia o violar los derechos humanos.
Isabel Brilhante Pedrosa dispuso de 72 horas para salir del turbulento país.
«No hubiéramos querido hacer eso», dijo Nicolás Maduro, el presidente venezolano. «Pero no podemos aceptar que alguien venga a ofender a Venezuela».
La medida del gobierno venezolano se produjo dos días después de que los cancilleres de la UE sancionaran a 19 funcionarios venezolanos, congelaran sus activos y les prohibieran ir al bloque, citando el deterioro de la situación que enfrenta Venezuela después de las elecciones de diciembre de 2020.
Los principales partidos de la oposición boicotearon esas elecciones.
Hasta el momento, 55 funcionarios venezolanos han sido sancionados por la Unión Europea.
Es la segunda vez en casi ocho meses que Brilhante Pedrosa es declarado persona non grata y se le ordena salir de Venezuela.
Las medidas en ambas ocasiones estuvieron vinculadas a sanciones impuestas por el bloque europeo contra funcionarios y aliados de Maduro.
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