Venezolano Juan Guaidó expulsado de Colombia

Caracas, Venezuela –

El líder opositor venezolano Juan Guaidó dijo que fue expulsado de Colombia pocas horas después de cruzar la frontera desde Venezuela para tratar de reunirse con algunos participantes en una conferencia internacional el martes para discutir la crisis política de su país.

En un video publicado en Twitter, Guaidó dijo que ingresó a Colombia tratando de escapar de la persecución del gobierno venezolano, pero que ahora también se sentía perseguido por el presidente Nicolás Maduro en Colombia.

La Cancillería de Colombia dijo este lunes en un comunicado de prensa que Guaidó se encontraba «irregularmente» en el país, por lo que las autoridades migratorias lo escoltaron hasta el aeropuerto internacional para tomar un avión con destino a Estados Unidos.

“La persecución de la dictadura lamentablemente se extendió hoy a Colombia”, dijo Guaidó en el video desde el interior de un avión. Agregó que estaba en un vuelo comercial a los Estados Unidos y que diría más el miércoles.

Después de que decenas de países consideraran que la reelección de Maduro en 2018 fue una farsa, Guaidó se autoproclamó presidente interino de Venezuela en 2019. Sin embargo, su popularidad ha disminuido desde entonces, y los legisladores de la oposición votaron en enero para despojarlo de ese cargo y en su lugar nombrar un comité para ejecutar lo que llaman su «gobierno interino».

La conferencia internacional del martes organizada por el presidente colombiano Gustavo Petro tiene como objetivo relanzar el diálogo oficial entre el gobierno de Maduro y sus opositores. Las negociaciones formales entre las dos partes, encabezadas por diplomáticos noruegos y organizadas por México, se estancaron a fines del año pasado.

“Pediré reuniones con miembros de las delegaciones internacionales”, dijo Guaidó en un comunicado. Dijo que esperaba que la reunión «asegure que el régimen de Maduro regrese a la mesa de negociaciones en México y acuerde un cronograma creíble para elecciones libres y justas para resolver la situación actual».

Según los informes, todas las reuniones de Guaidó con los delegados se llevaron a cabo al margen de la conferencia del martes. El canciller colombiano, Álvaro Leyva, emitió un comunicado diciendo que Guaidó no fue invitado a la conferencia y que no se esperaba que asistiera.

Hasta el lunes, Guaidó no salía de su país desde 2020.

Guaidó denunció recientemente un aumento de amenazas en su contra en Venezuela. En el comunicado, la figura de la oposición dijo que asumió lo que llamó los riesgos de viajar allí “para asegurar el apoyo internacional a la causa democrática en Venezuela”.

Guaidó ha criticado continuamente las políticas de Petro hacia Maduro, incluida la conferencia prevista, a la que asistirán representantes de Estados Unidos y al menos 15 países de América Latina y Europa. Petro y Maduro dijeron que intentarán poner fin a las sanciones económicas contra Venezuela durante su manifestación en la capital de Colombia, Bogotá.

Cuando Guaidó se autoproclamó presidente interino de Venezuela en 2019, encabezó un gobierno paralelo y contó con el respaldo de Estados Unidos, que le entregó el control de los activos venezolanos congelados en el extranjero a través de sanciones.

Inicialmente contó con un amplio apoyo, pero decepcionó a muchos que pensaban que podía derrocar a Maduro, y su popularidad se desplomó dentro y fuera de Venezuela. Ahora se encuentra entre los políticos de la oposición que están haciendo campaña antes de las primarias presidenciales previstas para octubre.

La reunión en Bogotá cobró impulso luego de que el presidente estadounidense, Joe Biden, y Petro se reunieran en la Casa Blanca el jueves y discutieran los desafíos de Venezuela, entre otros temas. Los presidentes emitieron un comunicado conjunto expresando un “compromiso compartido de apoyar y contribuir a la resolución de la situación en Venezuela”.

Sin embargo, Petro dijo a los periodistas que su propuesta a la Casa Blanca incluía el desarrollo de un programa electoral, con garantías, y el levantamiento gradual de las sanciones impuestas por Estados Unidos con el objetivo de que “el pueblo decida libremente, sin sanciones, sin presiones, su propio destino”. «