En Venezuela, se utilizan tapas de botellas recicladas para crear frescos gigantes

Desde el siglo XX, muchos artistas han utilizado productos de desecho con fines artísticos. Uno de esos artistas es Oscar Olivares. El venezolano creó frescos monumentales a partir de decenas de miles de tapones de plástico en su país de origen.

Oscar Olivares utiliza tapas de botellas recicladas para crear murales ecológicos en varias grandes ciudades venezolanas, incluidas Caracas, La Grita, Maracaibo. Uno de ellos, que representa a la Virgen de Chiquinquirá, importante figura religiosa en la región de Maracaibo, tiene 30 metros de ancho y 2,5 metros de alto.

Pero son obras pequeñas comparadas con el mural que el artista inaugurará el 10 de diciembre en Guatire, en el estado Miranda. Según El Diario, será el mural más grande del mundo hecho con tapas de botellas recicladas, con una longitud de 90 metros. El actual titular fue construido en Dubái el pasado 11 de marzo por la filial saudí de Sony PlayStation.

Oscar Olivares pudo contar con la ayuda de muchos voluntarios de organizaciones ambientalistas, vecinos y escolares de Guatire, para colocar las 200.000 gorras que componen su creación. “Es emocionante ver cómo una pieza de arte urbano puede generar tanta pasión en el país”, dijo a El Diario en julio.

El artista parece universalmente aclamado en un país actualmente en crisis, que ha visto un éxodo de siete millones de personas en siete años (sobre una población total actual de alrededor de 28 millones). El alcalde de Maracaibo le otorgó la medalla de la Orden de Honor al Mérito Civil el 11 de noviembre en la inauguración de su mural en Chiquinquirá, “Niña Zuliana”.

Este reconocimiento oficial impulsa a Óscar Olivares a seguir trabajando de una «manera no convencional» que «comienza a afianzarse en Venezuela», según explicó al sitio de noticias en español. Según él, la creación de más frescos en tapas de botellas recicladas podría dar lugar a un verdadero movimiento artístico como el arte cinético, movimiento al que pertenecieron los artistas venezolanos Carlos Cruz-Diez y Jesús Soto, entre otros. Es por eso que planea seguir construyéndolos durante los próximos años. “A ese ritmo, tardaría 4 años en recorrer todos los estados de Venezuela, algo que me emocionaría mucho lograr”, dijo.

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